
Hay ocasiones en las cuales nos sentimos serenos, sin urgencias, satisfechos y casi nada nos hace falta.Este estado es circunstancial,breve,pero existe. Este poema dice relación con esto:
La tarde es apacible
La tarde es apacible
Las aves se desplazan
Con su baile sincronizado,
Como una sola familia
Todas reman en la misma dirección
De izquierda a derecha
De derecha a izquierda
En su celeste elemento
Nada las distrae
Son las danzarinas perfectas
Para unas olimpíadas.
Yo estoy apacible
Como un bebé satisfecho
El paisaje me contagia
Sigo el vaivén de la tarde
No pido nada más
Por hoy no pido nada más,
Podría morirme mañana
En la placidez de la vida
Y me iría gozosa con los ángeles
Podría despedirme del amor
Podría despedirme de la vida
Podría dejarme llevar
En los brazos dulces
De esta sutil forma de agonía.