
Cuidar la naturaleza,es un deber y una obligación social,del presente y del futuro de los que la vivimos y de los que nos sobrevivirán.No podemos ir por la vida mirando hacia el lado,como diciendo,a quien le corresponde.Todos somos corresponsables de preservarla.Este poema lo escribí en relación a ésto.
Para que el árbol no muera
Para que el árbol no muera
Tendremos que exprimir
La última gota de rocío
De sudor
La lágrima viuda que queda
El cristal azulado de hielo eterno
Que luego deviene en río
La lluvia que cae indolente
Sobre la tierra
Que toca las raíces
Y canta una triste canción
Tañendo el aire
Como a un laúd lastimero.
Habrá que tener
Un propósito de salvataje
Una suerte de filantropía
O mecenazgo
Una suave y delicada misión
Una forma de creer
Que el árbol es sin duda
Nuestro último cilindro de oxígeno.