29.6.12

Cementerios solitarios



Hay cementerios solitarios
en donde los latidos son ausencias
un descanso de huesos apenas
una brisa sin pausa,
la quietud una estatua invisible
los pájaros un deseo
las flores marchitadas sin piedad
la muerte
ni corazones ni sangre
ni caricias ni respiros
un silencio ensordecido
una sonrisa, un anhelo,
mi madre callada
para siempre noche
y para siempre un recuerdo
una espada atravesada
el dolor una carroza
que se fue alejando
tan lenta y tan queda
como una vela que se apaga.

1 comentario:

AleMamá dijo...

Por eso y por más, he pedido que me cremen pero, eso sí, que respeten mis cenizas y no las tiren, pues han constituido mi ser físico y yo creo que el hecho de haber anidado un alma humana merece el respeto de una sepultación cuidadosa en un lugar digno.

Saludos