21.8.12

Punto final




Con cuarzos líquidos
despachó la pena
la rabia
el estupor
y las culpas.
Fue como un temblor inesperado
una ausencia de tibieza
una daga sigilosa
un estilete
un adiós sin esperanza
una forma de matar gentilmente
con buenos modales y costumbres
con escasos indicios o señales,
arrancar por los costados
como un ladrón inoportuno
llevando lo robado,
dispuesta la huida,
el escape sin retorno,
sin delito
tan inocente como si fuera
niño de pecho.

3 comentarios:

lichazul dijo...

llegar a ese punto final, es totalizar y comenzar un nuevo horizonte, libre de esos lastres que nos perdieron

un abrazo Mónica desde Maipú
feliz semana

Rafael Humberto Lizarazo Goyeneche dijo...

Hola, Mónica:

Tal vez ese final sea un nuevo punto de partida, un nuevo comenzar.

Un abrazo.

Francisca Quintana Vega dijo...

Un poema intenso, profundo,con bellas metáforas...aunque la tristeza lo inunda. Un abrazo.